La sesión combina reflexología, masaje corporal completo y baño de sonido con cuencos tibetanos de diferentes tamaños. Los beneficios son numerosos: relajación profunda, supresión de emociones negativas, restauración de la armonía interior, aumento de la frecuencia vibratoria, eliminación de la tensión muscular, trastornos digestivos, dolores de cabeza, insomnio.